miércoles, 6 de julio de 2016

DEBER DEL SEGUNDO PARCIAL - PRIMER QUIMESTRE



ACTIVIDAD 1 
* Mártires de la Iglesia Católica


                Santa Águeda




Agueda nació en Catania, Sicilia, al sur de Italia, hacia el año 230.  Vivió en la Sicilia del siglo III d. C.

Santa Águeda poseía todo lo que una joven suele desear: Una familia  distinguida y belleza extraordinaria. Pero atesoraba mucho, más que todo, su fe en Jesucristo. Así lo demostró cuando el Senador Quintianus se aprovechó de la persecución del emperador Decio  (250-253) contra los cristianos para intentar poseerla. Las propuestas del senador fueron resueltamente rechazadas por la joven virgen, que ya se había comprometido con otro esposo: Jesucristo.

Quintianus no se dio por vencido y la entregó en manos de Afrodisia, una mujer malvada, con la idea de que esta la sedujera con las tentaciones del mundo. Pero sus malas artes se vieron fustigadas por la virtud y la fidelidad a Cristo que demostró Santa Águeda.

Quintianus entonces, poseído por la ira, torturó a la joven virgen cruelmente, hasta llegar a ordenar que se le corten los senos. Es famosa respuesta de Santa Águeda: "Cruel tirano, ¿no te da vergüenza torturar en una mujer el mismo seno con el que de niño te alimentaste?".

La santa fue consolada con una visión de San Pedro quién, milagrosamente, la sanó. Pero las torturas continuaron y al fin fue meritoria de la palma del martirio, siendo echada sobre carbones encendidos en Catania, Sicilia (Italia). 







                                         San Sebastián


Sebastián, hijo de familia militar y noble, era oriundo de Narbona, pero se había educado en Milán. Llegó a ser capitán de la primera corte de la guardia pretoriana. Era respetado por todos y apreciado por el emperador, que desconocía su cualidad de cristiano. Cumplía con la disciplina militar, pero no participaba en los sacrificios idolátricos. Además, como buen cristiano, ejercitaba el apostolado entre sus compañeros, visitaba y alentaba a los cristianos encarcelados por causa de Cristo. Esta situación no podía durar mucho, y fue denunciado al emperador Maximino quien lo obligó a escoger entre ser su soldado o seguir a Jesucristo.

El santo escogió la milicia de Cristo; desairado el Emperador, lo amenazó de muerte, pero San Sebastián, convertido en soldado de Cristo por la confirmación, se mantuvo firme en su fe. Enfurecido Maximino, lo condenó a morir asaeteado: los soldados del emperador lo llevaron al estadio, lo desnudaron, lo ataron a un poste y lanzaron sobre él una lluvia de saetas, dándolo por muerto. Sin embargo, sus amigos que estaban al acecho, se acercaron, y al verlo todavía con vida, lo llevaron a casa de una noble cristiana romana, llamada Irene, que lo mantuvo escondido en su casa y le curó las heridas hasta que quedó restablecido.


Sus amigos le aconsejaron que se ausentara de Roma, pero el santo se negó rotundamente pues su corazón ardoroso del amor de Cristo, impedía que él no continuase anunciando a su Señor. Se presentó con valentía ante el Emperador, desconcertado porque lo daba por muerto, y el santo le reprochó con energía su conducta por perseguir a los cristianos. Maximino mandó que lo azotaran hasta morir, y los soldados cumplieron esta vez sin errores la misión y tiraron su cuerpo en un lodazal. Los cristianos lo recogieron y lo enterraron en la Vía Apia, en la célebre catacumba que lleva el nombre de San Sebastián.




ACTIVIDAD 2
* Símbolo de la Iglesia Católica en sus 
  inicios - Importancia

                  El Pez





Los peces se han utilizado como un símbolo de Cristo y el cristianismo desde los primeros días de la Iglesia.   La palabra griega para los peces es “Ichthus”.
Es un acrónimo para Jesús:
I
Iesous
Jesús
ch
Christos
Cristo,
th
theou
Hijo de
u
Uios
Dios, y
s
Soter
Salvador

El pescado es también un emblema de los apóstoles que eran pescadores y la promesa de Cristo para hacerlos "pescadores de hombres" (Marcos 1:17).

Otro significado que tiene este símbolo es para recordar   que Jesús hizo milagros, alimentó multitudes con unos pocos peces y sobrecargó  la barca de Pedro con una gran pesca.


El simbolismo de estos pescadores representaba su comisión de traer almas al conocimiento y reconocimiento de Jesús como Salvador. Difundir las buenas nuevas de Jesús es el corazón mismo, aún hoy, del llamado de todos los cristianos.





ACTIVIDAD 3
* ¿Por qué el Papa Francisco habla de la cruz como un 
    fracaso en la vida de Jesús?

Probablemente habla de la cruz como un fracaso en la vida de Jesús, porque a pesar de haberse sacrificado por la humanidad, continuamos cayendo en el pecado, en alejarnos de Dios y parecería ser que el sacrificio que Jesús hizo en la cruz del calvario, fue en vano.

Considero como opinión personal que:

“Jesús, humanamente hablando, jamás fracaso; él fue perfecto y venció en la cruz y marcó su triunfo al resucitar”